- Volver al trabajo después de las vacaciones de Navidad puede ser una experiencia estresante, especialmente para muchos trabajadores insatisfechos con su trabajo.
- Casi la mitad de los trabajadores manifiestan altos niveles de estrés laboral.
La insatisfacción puede estar vinculada a un lugar de trabajo poco saludable, incluso tóxico, donde el comportamiento negativo y el liderazgo deficiente perjudican el bienestar y la productividad de los empleados.
Los indicadores clave incluyen acoso, hostigamiento, falta de confianza, mala comunicación y alta tensión laboral.
Impacto de los lugares de trabajo tóxicos
Si crees que tu lugar de trabajo es tóxico, vale la pena considerar el impacto que esto tiene en tu salud mental. También puedes considerar el grado de compromiso de tu organización con el apoyo a la salud mental de los empleados.
La toxicidad puede desarrollarse gradualmente a través de patrones sutiles de microgestión, exclusión o erosión de la moral.
Estas dinámicas crean un entorno agotador que socava el bienestar individual y el éxito empresarial.
Además de afectar la salud mental de los empleados , existe cada vez más evidencia de que el estrés en el trabajo puede provocar graves problemas de salud física, como enfermedades cardiovasculares.
Según Safe Work Australia, las reclamaciones de indemnización por accidentes de trabajo relacionados con la salud mental aumentaron en más de un tercio desde 2017 a 2018.
Entre 2021 y 2022, se aceptaron 11.700 reclamaciones relacionadas con problemas de salud mental. Estos casos resultaron muy costosos para los empresarios, ya que la indemnización media pagada en ese país fue de 58.615 dólares australianos.
La Organización Internacional de Normalización ISO publicó una norma global en 2021 para ayudar a gestionar los riesgos de salud y seguridad psicológica en los lugares de trabajo.
Varios países, incluidos Canadá y Australia, han introducido leyes y normas que responsabilizan a los empresarios de prevenir y gestionar el estrés relacionado con el trabajo.

Para fomentar un lugar de trabajo seguro, algunos investigadores (incluido uno de los autores) han recomendado un enfoque integrado y multidisciplinario para garantizar que las empresas respondan adecuadamente a los riesgos para la salud mental.
Lo que hace tu empresa en las siguientes tres áreas puede demostrar su compromiso con la protección de la salud mental.
1. Prevenir, minimizar o gestionar los aspectos negativos
La mayor parte de la legislación y las normas sobre trabajo, salud y seguridad se relacionan con la protección de los empleados contra riesgos físicos, incluidos resbalones, tropiezos y caídas. Más recientemente, la atención se ha centrado en los riesgos psicosociales.
Estos incluyen acoso, cargas de trabajo excesivas, poco control laboral, falta de claridad en los roles y exposición a eventos traumatizantes, por ejemplo, presenciar un accidente.
En concreto, en España, La Ley de Prevención de Riesgos Laborales (LPRL, cap. 1, art. 2) establece como principio fundamental la prevención de cualquier riesgo profesional para proteger la seguridad y la salud de los trabajadores, eliminando o reduciendo los peligros derivados del entorno laboral.
Este principio abarca todo tipo de riesgos, pero la percepción del peligro varía considerablemente cuando se comparan riesgos físicos obvios, como caídas o atrapamientos, con riesgos psicosociales, tales como el estrés o la violencia en el trabajo.
Aunque ambos pueden ser igualmente perjudiciales para la salud, los riesgos psicosociales suelen pasar desapercibidos, y las afecciones a la salud se atribuyen más a vulnerabilidades individuales. Esto refleja una falta de concienciación en torno a estos riesgos entre los principales actores implicados en la prevención, como empresarios, trabajadores y técnicos.
La mayoría de los empresarios pueden realizar las mejoras necesarias, incluida la creación de cargas de trabajo más justas, la redefinición de los roles laborales y la prestación de más apoyo a los empleados individuales.
2. Responder a los problemas de salud mental de los empleados
A pesar de los esfuerzos por minimizar el impacto de los riesgos psicosociales, algunos empleados experimentarán problemas de salud mental.
Los empresarios no deben intentar tratar los problemas de salud mental de sus empleados, sino brindarles apoyo y orientarlos hacia un profesional de la salud mental adecuado, como Lola Carrión.
Los directivos y mandos intermedios también pueden ayudar identificando señales de angustia, teniendo conversaciones sensibles con los trabajadores sobre el impacto de las enfermedades mentales y realizando cambios razonables en sus funciones.
Otra cosa que puede ayudar es brindar a los empleados acceso a servicios de apoyo a través de programas de asistencia al empleado, que pueden ofrecer asesoramiento confidencial a corto plazo.
Establecer un procedimiento de investigación de incidentes críticos para eventos que hayan comprometido la salud mental de los empleados puede ayudar a identificar la causa de los incidentes y dar forma a las respuestas.
3. Promover lo positivo
Además de gestionar los aspectos negativos del trabajo, las empresas y organizaciones pueden crear condiciones que promuevan la salud mental y el bienestar de los empleados.
Un enfoque para lograr esto es ofrecer modalidades de trabajo flexibles, como el trabajo híbrido, que coombine trabajo presencial y teletrabajo y que pueda ofrecer a los empleados mayores opciones en cuanto a ubicación y horarios de trabajo.
Otro enfoque consiste en fomentar la conexión social y la inclusión entre los empleados. Esto podría implicar la formación de equipos, eventos sociales y oportunidades para que los empleados entablen relaciones.
Las empresas también pueden promover una cultura de seguridad psicológica, en la que los empleados se sientan capaces de mostrar su auténtico yo en el trabajo y expresar sus opiniones con libertad. Esto se ha relacionado con un mayor bienestar de los empleados.
El modelo SMART sugiere que los empleados estarán más satisfechos en trabajos que proporcionen estimulación (por ejemplo, resolver problemas significativos), dominio (recibir tutoría o retroalimentación constructiva), autonomía (libertad creativa), relaciones sociales (colegas que apoyan) y demandas tolerables (falta de riesgos psicosociales)

Entonces, ¿debería quedarme o debería cambiar de trabajo?
Tomar la decisión de dejar un lugar de trabajo requiere una cuidadosa reflexión.
Además de tu propio bienestar, debes considerar si tu empresa prioriza la salud mental y si el iniciar una discusión sobre salud mental en el entorno laboral es factible para ti.
Recuerde que si bien cambiar de trabajo es un gran paso, permanecer en un lugar de trabajo tóxico puede tener graves consecuencias a largo plazo, tanto para tua salud mental como física.
Considera buscar asesoramiento a través de un Psicólogo como los que puedes encontrar en el Centro de Psicología y Desarrollo Personal Lola Carrión.
Sea cual sea tu decisión, priorizar tu salud mental y tu bienestar debe ser un aspecto central en tu toma de decisiones.
Fuentes: The Conversation, Wikipedia.
Psicología clínica y desarrollo personal
En el Centro de Psicología Lola Carrión llevamos más de veinte años ayudando a que las personas mejoren su calidad de vida.